Cuando la gente habla de coches y películas, el Ford Mustang GT Fastback de 1968 de Steve Mac Queen en Bullit suele estar en lo más alto de la conversación. Sin embargo, otro coche americano es más representativo: el Dodge Challenger R/T de 1970. Coprotagonizó junto a otros monstruos motorizados la película «Fast and Furious» y protagonizó la película de culto «Vanishing Point» en 1971.
Lanzado entre 1970 y 1974, esta segunda generación del Challenger se dio el lujo de producir cerca de 200.000 unidades. ¡No está mal para un coupé! El modelo del que hablamos hoy, el R/T (por Road and Track), fue un éxito gracias a su amplia oferta de motores y acabados. En cuanto a los motores, había para todos los gustos (y para todos los presupuestos), desde 6 cilindros de 145 CV hasta V8 de 230 a 375 CV. El éxito se vio reforzado por los múltiples acabados, por ejemplo, había 18 colores de carrocería disponibles, detalla el concesionario de coches de segunda mano Granada Crestanevada. Es decir, la personalización, muy de moda en estos momentos, ya era una realidad. De hecho, era casi imposible encontrar dos Challengers idénticos.
PUNTO DE FUGA
Esta película de acción estrenada a principios de 1971 es una road movie en el espíritu de los años setenta. El protagonista, Kowalski, es un antiguo militar y veterano de Vietnam. Se convirtió en piloto de Nascar y ahora es mensajero de coches. Este trabajo, que probablemente ya ha desaparecido, consistía en repartir coches por carretera por todo Estados Unidos. El amor de su vida, una hermosa surfista, fue asesinada unos años antes mientras practicaba su deporte favorito. Le dan un Dodge Challenger R/T 426 blanco en Denver, Colorado, para entregarlo en San Francisco, California.
Tras una apuesta, anunció que podría hacer el viaje en 15 horas. Este es el comienzo de una loca persecución con la policía. Preferimos no contar más para que los que quieran descubrir esta película…
Compre hoy un Dodge Challenger 1970-1974
Pocos modelos de esta época han cruzado el Atlántico. Por ello, es mejor acudir a un importador especializado que le busque el coche que corresponde a sus deseos y le gestione los siempre tediosos trámites administrativos. Sin embargo, los coches Challenger de esta época siguen siendo muy populares en Estados Unidos. Hay que invertir entre 20.000 y 100.000 dólares. Juzguen ustedes…