¿Cuándo conviene visitar a un abogado?

En la mayoría de las ocasiones se recurre a un abogado cuando no queda más remedio. Entonces la solución sólo pasa por un proceso judicial. Sin embargo, el ahorro de tiempo y dinero puede ser considerable si se realiza una simple consulta antes de llevar a cabo actos que pueden acarrear consecuencias legales. Es recomendable acudir a un bufete en contratos de arrendamiento, adquisición de vivienda o accidentes de tráfico.

En contratos de arrendamiento, las dos partes implicadas en la firma (propietario e inquilino) deben asesorarse legalmente antes de firmar un contrato de alquiler. Ello permite que ambos conozcan perfectamente sus derechos y obligaciones. Así evitan cualquier tipo de conflicto. Es muy recomendable asesorarse cuando se alquila un local para explotar un negocio. Es así porque la Ley de Arrendamiento es menos clara que en los alquileres de vivienda.

Cuando se adquiere una vivienda se debe realizar una consulta jurídica antes de firmar un contrato de compra-venta, o una escritura de un inmueble. Si la vivienda no está terminada cuando se adquiere, el riesgo es mayor. Por ello, la ley obliga al vendedor de una vivienda sin terminar a otorgar un aval sobre ella. Esto suele incumplirse la mayoría de las ocasiones.

En los accidentes de tráfico no siempre los intereses de la compañía aseguradora coinciden con los del particular que ha sufrido el accidente. Es conveniente consultar a un abogado para asesorarse sobre los derechos del cliente. Obviamente este abogado no debe estar vinculado a la compañía de seguros.